#Dante2018

La idea cogió fuerza enseguida. El ensayista argentino Pablo Maurette propuso en las redes leer la Divina Comedia de Dante Alighieri a razón de un canto diario, hasta completar la obra en cien días y comenzando el 1 de enero.

Esta lectura conjunta se ha hecho viral y ya en Italia, Colombia, China, España, Australia... grupos de lectores llegan a su cita diaria con ganas de “hablar” con miles de desconocidos sobre temas que han conmovido a todas las generaciones desde el siglo XIV. Aquí, también un grupo de lectores “queda” cada día en el ciberespacio para leer y comentar el canto del día en Twitter o Facebook.

La calidad de los aportes de los expertos, como el colombiano Humberto Ballesteros y el dominicano José Martí, ha dado una extraordinaria riqueza a la conversación y la lectura que en algunos lugares se hace de manera presencial.

Es decir, la gente se reúne para leer a Dante. Y todo gracias a una buena idea compartida en el ciberespacio.

La inteligencia artificial (¿o el puritanismo, la ignorancia?) no termina de entender el mundo del espíritu. La página dedicada a la Divina Comedia incluye las ilustraciones de los grandes maestros que la interpretaron: Gustav Doré, Miquel Barceló, Sandro Boticelli, Salvador Dalí... Sus obras son para Facebook imágenes peligrosas o spam (desgarros, desnudos) y ya ha enviado su advertencia...

Las posibilidades que la tecnología ofrece a las buenas ideas no dejan de sorprender. ¿Quién podría haber imaginado que el Infierno, Purgatorio y Paraíso interpretados y narrados por un poeta hace siete siglos fueran hoy una cita diaria de miles de personas en todo el mundo?

Y más aún, que los desvelos intrínsecos a la naturaleza humana sean hoy los mismos que preocuparon a los hombres de la transición de la Edad Media al Renacimiento.

IAizpun@diariolibre.com