Las utopías han cambiado
La humanidad ha vivido de utopía en utopía. En realidad, la utopía era un escape a la realidad que se vivía, que se soportaba en la esperanza de tiempos mejores, en los que el amor primaría entre los hombres y no habría necesidad de leyes, tribunales ni ejércitos.
El imaginario utópico se reflejó en numerosas instituciones de la sociedad y en sistemas políticos que se encargarían de crear a ese “hombre nuevo” para una sociedad nueva.
El progreso de la humanidad ofreció nuevas esperanzas, pero fueron mayores los peligros que creaba y ha crecido el pesimismo y la desesperanza.
Las instituciones seculares con que contábamos para afianzar el orden y establecer la sociedad perfecta se nos han ido desmoronando. Desde la Justicia, los partidos, la democracia y las iglesias, ya no despiertan fe ni entusiasmo y las nuevas generaciones hiper individualizadas solo creen en el yo y en el presente.
Como expresa Diego Sánchez Meca, “nuestra mentalidad consumista hoy dominante y cada vez más globalizada, tanto en economía como en política, no es capaz de responder a los retos globales que pesan sobre el futuro de la humanidad. El capitalismo neoliberal hoy radicalizado socava la convivencia pacífica al agrandar las desigualdades y hacer cada vez más difícil la democracia. Por otra parte, la máquina de producción y consumo marcha incontroladamente hacia la destrucción progresiva de las condiciones materiales de supervivencia, y es ingenuo pensar que vaya a detenerse para cambiar su velocidad y su rumbo.”
¿Podrá sobrevivir un mundo sin utopías?
Tener un millón de pesos y saber leer, entre los requisitos para ser precandidato del PRM
Ministerio Público comienza lectura de la acusación del caso Medusa
El milagro de los 40 días de la "Operación Esperanza" que rescató cuatro niños en Colombia
Hermanos implicados en caso La Guáyiga murieron a tiros a manos de la Policía
El Codia alerta sobre “epidemia” de construcciones ilegales en RD