Sentido de las proporciones

Los dominicanos, particularmente aquellos que están en posiciones dirigenciales, parecen haber perdido el sentido de las proporciones.

Se generan expresiones tremendistas por cualquier quítame esta paja, y parece que el mundo se va a acabar por una acción que solo tiene que seguir su curso normal para que se resuelva.

El diario vivir de los dominicanos, los periódicos, las redes sociales, están llenos de pequeñas crisis, algunas de ellas insignificantes, que son catapultadas a nivel de un armagedón, una batalla final en la que todos moriríamos. Y lo peor es que le hacemos caso.

Ahora la crisis es por una decisión del Tribunal Superior Electoral que, aparentemente, ni los que la critican han leído.

A consecuencia de esa decisión ha habido insultos personales de la peor ralea, amenazas de destituir a un tribunal por tomar una decisión (equivocada o no) y la creación de una crisis electoral.

Si ese fuera el parámetro para medir a los jueces, no quedaría un magistrado en la tierra, porque todos se equivocan y en todos los juicios hay uno que pierde y no está conforme.

Pero esta decisión afecta a un aliado político del Gobierno y se han desatado los demonios.

Y aquí viene lo peor: ¿por qué tiene todo el país que detenerse para resolver el problema de unos cuantos líderes enfrentados a otros cuantos líderes de un partido, si ellos no son capaces de resolver sus diferencias? ¿De qué talante democrático estamos hablando?

Esta tendencia al falso conflicto nos va a destruir.