La política a segundo plano

La dinámica que imponen las medidas contra el COVID-19 ha provocado que la política pase a un lejano segundo plano, lo que crea ansiedad y desespera a políticos que se ven marginados de la agenda nacional y obligados por la coyuntura a actuar con desinterés. Más que discursos generales y propuestas consabidas, los políticos no tienen de otra que ser solidarios y sumarse a las autoridades para combatir la enfermedad cobijados bajo la consigna que agrupa a todas las clases sociales: “Quédate en casa”. Alrededor de esa consigna se está dando hoy la unidad nacional, lo que economiza retórica y allana el camino para otras medidas. La hora impone que solo se trabaje por el país. Y ¡ay! de aquel que pretenda sacar provecho personal.