Los intereses están primero

A propósito de la sacada de pie de los industriales a los de la Marcha Verde vale recordar cuestiones elementales de la lucha de clases: No se atenta contra sí mismo ni contra sus propios intereses. Cómo es que si tratan de alterar el orden institucional y abrir las puertas a la incertidumbre y al caos pretenden que los empresarios les acompañen y financien. Se atribuye a Marx la expresión de que “las clases sociales no se suicidan”, por lo que es ilógico que los empresarios renuncien voluntariamente a sus intereses para impulsar los de otros. Podrían, en determinado momento, acompañar causas que no les afecten en lo fundamental, pero hasta ahí. No es un asunto de gratitud o de ingratitud, son sus intereses de clases lo que ahora reivindican los industriales que se distancian y acusan a los de la Marcha Verde que han querido cogerlos de tontos útiles. En este nuevo escenario, queda abierta una pregunta a los verdes: ¿Qué intereses representan o aspiran a representar? Mientras más claridad, más amistad, reza el refrán.