Terreno fértil de lo negativo

De la entrega de ayer sobre la necesidad de promover las cosas positivas hay algo que por obvio no ameritaba detalles, y es que la Declaración Jurada de Patrimonio es obligatoria en virtud de la Ley 311-14 y que por tanto no hay que felicitar al que la cumple. Pero mi enfoque apunta a que un estudio publicado por una dependencia de la PUCMM se deja ganar por el pesimismo que corroe a la sociedad, y omite que hay más legisladores y ediles que han hecho su declaración que los incumplidores; además, es un dato relevante digno de mención que todos los funcionarios del Poder Ejecutivo han declarado sus bienes, con lo que se restaría cancha al revanchismo y al tremendismo, y se incentivarían los valores positivos.