Un “enfermo” muy peligroso

Se cumplieron ayer seis años del atentado en contra de Jordi Veras, y todavía batalla en los tribunales junto a su padre Negro Veras para que Adriano Román, el autor intelectual, y los sicarios a su servicio, cumplan en la cárcel hasta el último día de sus condenas. Dos nuevos retos afrontan Jordi y su padre, pues luego de que un tribunal sentenciara a Román a 30 años y en Apelación ratificaran la condena, la Suprema Corte deberá pronunciarse en Casación, mientras el inculpado se afana para ser enviado a su casa dizque por problemas de salud. Hay que alentar a la familia Veras Rodríguez para que no desmaye, porque su causa es inspiradora en la lucha contra el crimen, y exigir a las autoridades mucho celo con un “enfermo” que, encerrado y vigilado en una celda, demostró tener protección especial y recursos económicos suficientes para mandar a matar al abogado de su exesposa.