Cuánto sabes sobre la somatización

¿Has oído hablar de la somatización? En este caso hablamos de síntomas reales que reflejan en el cuerpo y en los procesos corporales algunas emociones. Sin embargo, esto es muy común que se confunde con la hipocondría.

La hipocondría es la preocupación constante de padecer una enfermedad y la intranquilidad, incluso ante un consejo médico o un diagnóstico. En el caso de la somatización, los síntomas son completamente reales.

Aquellas personas que somatizan suelen presentar características comunes como una hiperexigencia laboral que incluso les hace desoír consejos de amigos, familiares o incluso atender las propias señales de su cuerpo.

Este tipo de personas suelen separar los procesos intelectuales de los corporales, como si la mente y el cuerpo anduvieran por carriles separados.

Para aliviar los síntomas hay que, ante todo, buscar apoyo médico para poder identificar las causas del problema y atenderlo correctamente. Posiblemente se necesite también una terapia para mejorar la salud mental y reducir los niveles de estrés que provoca la somatización.

Si a esto, además, se lo acompaña de un estilo de vida saludable, haciendo ejercicio, durmiendo bien y cuidando la alimentación, se podrán obtener más beneficios para la salud física y mental.

Y tú, ¿conocías estas diferencias?