Cita musical: Concierto homenaje a Margarita Copello de Rodríguez este miércoles 6 de abril

Las tres obras que se presentarán en esta gala homenaje están entre sus favoritas

El Maestro Molina y la Orquesta Sinfónica Nacional se entregarán en cuerpo y alma para honrar a doña Margarita Copello de Rodríguez. (Fuente externa)

Este 6 de abril se hará un concierto homenaje a Doña Margarita Copello de Rodríguez. Se merece todos los homenajes, se los ganó todos.

Si me preguntan sobre el programa, pienso que ella susurró al Maestro Molina qué le gustaría escuchar, y él, por supuesto, no iba a dejar de complacerla. Las tres obras que se presentaran están entre sus favoritas. Su presencia nos acompañará todo el concierto. Una noche que no nos debemos perder, estará cargada de emociones y de exquisita música. 

Del Maestro Molina y de la Orquesta Sinfónica Nacional no hay mucho que decir, se entregarán en cuerpo y alma para honrar a quien para la Orquesta fue por muchos años su más leal protectora y para su director titular, su madre musical, como siempre la llamó.   

El tono del concierto se marca desde su inicio con el bellísimo Intermezzo de la ópera Cavalleria Rusticana de Pietro Mascagni, estrenada en 1890. Su Intermezzo se ha convertido en obra regular en conciertos, es una maravillosa pieza musical, llena de la ternura más impensable que se pueda sentir. Una de las obras musicales más bellas de la historia. 

El solista de la noche es el pianista ucraniano Dmytro Choni. De él dice la crítica: “Su arte de frasear, su lirismo, los matices y el perfecto control de la dinámica, la transparencia y un estupendo virtuosismo son sobresalientes. Su interpretación emana así siempre el aura de la más alta meta artística y la más fina sensibilidad".  Es ganador del 1er Premio y Medalla de Oro del Concurso Internacional de Piano de Santander Paloma O'Shea. En medio de la guerra que aplasta su país, Choni nos trae uno de los más bellos conciertos del repertorio pianístico, el Concierto No. 2 para Piano y Orquesta de Sergei Rachmaninov. No hay apertura de concierto más famosa que los acordes que inician este segundo concierto para piano del compositor ruso, estrenado en 1901. Rachmaninov parece emerger de una oscuridad incierta, a la deslumbrante confianza de la larga y suntuosa melodía que sigue. De hecho, Rachmaninov no había compuesto nada durante tres años. Desde el desastroso estreno de su primera sinfonía, se encontraba sufriendo de una profunda depresión, buscó el consejo del hipnotizador Dr. Nikolai Dahl, quien logró alentar a Rachmaninov a escribir de nuevo. Este concierto para piano está dedicado a Dahl. Rachmaninov compuso el primer movimiento en último lugar. Para un compositor tan melódicamente efusivo, la riqueza de grandes melodías en este concierto es extraordinaria. Técnicamente exigente para los solistas. Su popularidad entre el público lo convierte en uno de los conciertos más interpretados. Un éxito desde su estreno, ha sido, desde entonces, elemento básico para los grandes pianistas, un arma de triunfo con el público. La reacción al escuchar este concierto una y mil veces será la misma, pura emoción. 

Después del intermedio, volvemos a los apasionados rusos con P. I. Tchaikovsky. Las historias de amor de triste final, siempre atrajeron a este atormentado compositor; la tragedia de Shakespeare, Romeo y Julieta, no fue una excepción. Con una duración de apenas veinte minutos, la Obertura Fantasía de Romeo y Julieta, extrae la esencia de la obra y la expande como el aroma de un perfume, en una pasional confrontación de temas. La obra de Shakespeare inspiró en Tchaikovsky la creación de una obra maestra, atronadoramente dramática y dolorosamente bella. Abre con una larga introducción para presentar la música opresivamente brutal del conflicto entre los Capuletos y los Montescos, y un tema de amor arrebatador para Romeo y Julieta. Finalizando, una sombría versión del tema del amor se transfigura en una música serena, terminando con una nota triunfal y de otro mundo. La eterna reflexión que mantuvo Tchaikovski en su vida sobre el destino, el amor y la muerte.

Doña Margarita estará complacida, así como todo el público asistente. Rindamos homenaje a Dona Margarita con un fuerte aplauso.

Estudió artes liberales. Es curiosa y le encanta escribir. La lectura y la música son su pasión. Esa pasión le ha llevado a estudiar y tratar de profundizar en un océano lleno de notas inacabables y pleno de placer.