Restaurante Lina, ejemplo de calidad y tradición

Santo Domingo. "Somos famosos desde la década de los 50, y hay una adagio que todavía se mantiene: clientes que vienen de fuera dicen que si no visitan el restaurante Lina no han venido a Santo Domingo".

Las palabras de Francisco Tejeda Díaz, maitre del restaurante del Hotel Lina, creado a final de la década de 1950, reflejan la calidez y la tradición que, pese a la gran competencia, mantiene al restaurante en la preferencia de una clientela que, en parte, se ha mantenido fiel a su cocina.

Con la música del pianista Israel de la Cruz de fondo, Tejada Díaz, quien trabaja allí desde 1969, asegura que desde el "Lina Viejo", en referencia al antiguo local de la Independencia, y del que opera la Máximo Gómez con 27 de Febrero, desde el año 1973, el restaurante se ha mantenido por la calidad de sus ofertas internacionales y una especialidad en paella marinera y valenciana, y platos flameados que lo distinguen.

Mientras conversa, Jorge Mármol Ferreras, camarero flameador, prepara un chillo flameado al brandy, uno de los más demandados por los clientes.