ONG de Miami pide a EEUU política migratoria "seria" para evitar tragedias
La presencia de migrantes en la zona se ha intensificado este año desde que Estados Unidos
La organización Raíces Venezolanas Miami afirmó este martes que el incendio ocurrido en un centro del Instituto Nacional de Migración (INM) en Ciudad Juárez (México), que dejó 39 muertos y 29 heridos, podría haberse evitado con políticas migratorias "serias" de parte de EE.UU.
La organización señaló que el sistema actual basado en la aplicación informática CBP One no funciona y que con este sistema los migrantes quedan varados en una zona "en estado de vulnerabilidad y desesperación".
En un comunicado denunció que esa aplicación se colapsa por la alta demanda, "mientras aún más (migrantes) continúan su camino hacia la frontera sur por caravanas o grupos pequeños".
Raíces Venezolanas Miami señaló que por ello "los inmigrantes pasan meses intentando lograr que la aplicación CBP One les acepte su petición de ingreso".
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, responsabilizó del incendio a las propias víctimas, quienes, según dijo, habrían quemado colchones para frenar su deportación.
Según la Fiscalía mexicana, entre los fallecidos y heridos hay personas de nacionalidad colombiana, ecuatoriana, salvadoreña, guatemalteca, hondureña y venezolana.
La presencia de migrantes en la zona se ha intensificado este año desde que Estados Unidos anunció nuevas medidas, que incluyen la deportación inmediata a México de migrantes de Haití, Venezuela, Nicaragua y Cuba que crucen la frontera de manera irregular.
Según Raíces Venezolanas, fuentes extraoficiales a las que tuvieron acceso, que pidieron mantenerse en el anonimato, les dijeron que los eventos que desencadenaron la tragedia comenzaron cuando el INM hizo una redada debido a quejas por la actitud de algunos inmigrantes.
"Los inmigrantes que fueron detenidos habían sido engañados y llevados al puesto migratorio bajo la promesa de que se les arreglaría su situación. Una vez allí, las autoridades mexicanas les dijeron a los inmigrantes que no les iban a arreglar nada sino que, por el contrario, serían deportados", indica el comunicado.
La organización pidió que se cumplan los acuerdos entre México y EE.UU. para recibir inmigrantes, además de cuestionar si en realidad el primero de los países tendría la capacidad de atender a los aproximadamente 50.000 inmigrantes que ya se encontraban en la zona fronteriza.
La organización de Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex), con sede en Miami, por su parte, solicitó a través de su presidente, José Antonio Colina, al Gobierno mexicano información con carácter de urgencia de las nacionalidades y los nombres de los inmigrantes fallecidos y heridos, ya que una buena parte se presume que eran venezolanos.
"Exhortamos a las autoridades mexicanas a atender la crisis migratoria en su frontera con el mayor profesionalismo posible, dado lo delicado y volátil de la situación", dijo Colina.
La presencia de migrantes en la zona se ha intensificado este año desde que Estados Unidos anunció nuevas medidas, que incluyen la deportación inmediata de migrantes de Haití, Venezuela, Nicaragua y Cuba que lleguen por tierra bajo el Título 42.