Soluciones a los problemas de belleza más comunes durante el embarazo

Muchos de los problemas que se experimentan con más frecuencia durante el estado de gestación se pueden prevenir o tratar si actúas a tiempo

Con el embarazo vienen cambios físicos con los que no siempre se está conforme. (Freepik)

Muchas estarán de acuerdo con que el embarazo es una de las etapas más lindas y sublimes que puede experimentar una mujer. Sin embargo, hay que reconocer que con él vienen cambios físicos con los que no siempre se está conforme, como las celulitis y las estrías, por ejemplo.

Y claro, aunque el simple hecho de saber que traerás un bebé al mundo, fruto de tus entrañas, hace que esas marcas se conviertan en las señales perfectas de un cuerpo capaz de dar vida, eso no debe ser excusa para desentenderte por completo del cuidado de tu piel y no mimarte como mereces.

Por si no sabías, muchos de los problemas que se experimentan con más frecuencia durante el estado de gestación se pueden prevenir o tratar si actúas a tiempo. Aquí te decimos cómo.

1. Piel reseca

Las hormonas tiroideas y suprarrenales tienden a hacer de las suyas durante el embarazo; estas afectan la producción de sebo, dando lugar a la deshidratación de la piel. El aspecto de piel escamosa o agrietada, por lo general, es más notorio después de las 30 semanas de gestación.

Si pensaste que te habías librado del acné al pasar la pubertad, tenemos la mala noticia de que en el embarazo los brotes pueden resurgir. Esto porque las glándulas sebáceas de la piel (situadas en la dermis y compuestas de células llenas de lípidos) incrementan su producción de aceite.

Para tratarlo, debes ser muy rigurosa con tu rutina de limpieza facial: lavar dos veces al día y exfoliar al menos una vez por semana. Para ello, utiliza productos suaves a base de ingredientes naturales y recuerda mantenerte alejada de la Vitamina A, ya que en exceso puede ocasionar malformaciones en tu bebé.

Limitar el uso de maquillaje, o al menos de los cosméticos que contengan aceites, también puede ayudarte. Como ahora debemos usar mascarillas higiénicas para evitar contagios de COVID-19, un factor que también influye en la aparición de acné, inclínate por mascarillas de algodón en lugar de sintéticas o plastificadas, pues los tejidos más ligeros permiten que la piel respire.

3. Celulitis

La celulitis durante el estado de gestación puede deberse a diferentes causas, entre las cuales están la genética, el exceso de retención de agua, la mala alimentación y los cambios hormonales.

Si quieres prevenir su aparición, es importante que, en primer lugar, lleves una dieta balanceada, alejada de los alimentos fritos y comidas muy procesadas, y en la que incluyas frutas, verduras y mucha agua.

Además de lo que ingieres, es importante contribuir a la correcta circulación de la sangre, lo cual puedes lograr bañándote con agua fría en lugar de excesivamente caliente, y dándote masajes con movimientos circulares en la zona de glúteos y piernas, que es donde más salen las celulitis.

4. Estrías

Para albergar al bebé, el cuerpo se prepara de distintas maneras, y una de esas es el estiramiento de la piel, que es lo que produce las tan fastidiosas estrías. Debes saber que una vez estas salen, no hay marcha atrás, lo que quiere decir que actuar durante los primeros meses de gestación (preferiblemente primer trimestre) es la clave para evitar su aparición.

Tu trabajo consiste en hidratar la piel con cremas especiales para tu condición, religiosamente varias veces al día, ya que esto ayuda a aumentar la elastina y el colágeno. Ingredientes caseros como el aceite de almendras y el café también pueden ser de gran ayuda para exfoliar las zonas afectadas. Para optimizar los resultados, hazte de un cepillo de cerdas naturales para cepillar tu piel en seco.

5. Melasma

En algunas mujeres embarazadas se da la aparición de manchas con tono marrón en el rostro o el oscurecimiento de zonas como las axilas, areolas mamarias y línea media abdominal. Es causado por un aumento en la pigmentación y se conoce como melasma. Aparte de las alteraciones hormonales, en esta afección influyen factores genéticos y el grado de exposición solar, por lo que en países como el nuestro es bastante común.

Si bien no puedes prevenir su aparición, al menos sí puedes evitar que las manchas se acentúen. ¿Cómo? Limitando tu exposición al sol y usando protector solar con FPS 30 en adelante en cara y cuerpo, aún en días no soleados.

Periodista de Revista. Me apasiona escribir sobre salud mental y relaciones de pareja. De no ser periodista, sería psicóloga con un blog.