5 ideas para incrementar tu motivación laboral

¿Empezó un nuevo año, pero tu pasión y motivación se pusieron de acuerdo para tomar un hiato? ¿Olvidaste la razón por la que estás en tu trabajo en el primer lugar? ¡No te desesperes! Empieza por estas cinco ideas para recuperar tu motivación laboral en este 2020.

1. Recuerda tu porqué

¿Cuál es el propósito detrás de lo que estás haciendo? Si no es tan fácil responder esta pregunta, desplaza el “qué” o el “cómo” por unos minutos para recordar por qué estás aquí: ¿es tu pasión o la forma de proveer para tu familia? Esa respuesta te regalará el estímulo para mantenerte en rumbo.

2. Mira la visión más amplia

Cuando nos centramos en las tareas (y las quejas) del día a día, la motivación de disipa más rápido que un globo mal amarrado. Recuerda el “bigger picture”, el panorama general. Este se atará al paso anterior. ¿Qué lograrás por medio de tu trabajo actual? ¿Cómo beneficia a tus seres queridos? ¿Te permitirá hacer una diferencia en el mundo? ¿Te sirve como aprendizaje o escalón para seguir creciendo y alcanzar tus metas? Expande tu visión. Te darás cuenta que no estás tan atado como pensabas hasta el momento.

3. Divide tus objetivos en tareas manejables

Como la introspección, la reflexión y la respiración profunda no son para todo el mundo, pasemos a una acción más práctica. ¿Te abruman todos los objetivos que debes lograr? Desglósalos en tareas manejables e individuales a corto plazo. Break. Them. Down.

4. Organiza tu espacio

Hay una razón por la que este es un tema que sale a relucir frecuentemente cuando se conversa sobre cambio y bienestar. Porque funciona. ¿Cómo está tu lugar de trabajo? Empieza descartando lo que no usarás y organizando lo que mantendrás. Este es el primer paso que tu mente también se despeje y se organice. El ambiente te creará el espacio para la eficiencia y la productividad.

5. Recompénsate

Al pensar en premios tendemos a pensar en otros, en niños o demás seres queridos que se merecen una palmadita en la espalda por un trabajo bien hecho. Cambia un poco el guión y celebra tus propias victorias. Cuando completes tareas complejas o cuando sobrevivas a un día estresante, recompénsate. Plantea un sistema de recompensas para estos días y disfruta de tus pequeñas victorias.