Cómo mejorar la respuesta inmunitaria después de la vacunación

Estos hábitos te ayudarán a sacarle más provecho al efecto de la vacuna

Los hábitos de una persona pueden afectar la eficacia de una vacuna. (Pexels/Gustavo Fring)

Poco a poco se está llevando a cabo el plan de vacunación contra el COVID-19, pero después de que una persona se vacuna, ¿qué puede hacer para mejorar su respuesta inmunitaria? La eficacia de cualquier vacuna puede variar según el individuo de acuerdo a factores como edad, sexo, información genética y la presencia de condiciones o patologías como diabetes y enfermedades vasculares. Otro aspecto que hay que tomar en cuenta son los hábitos diarios de la persona porque algunos de ellos pueden tener un impacto positivo en la forma que un individuo reacciona ante una vacuna. Estos son algunos de esos hábitos.

Higiene de sueño

Dormir una cantidad apropiada de horas no solo ayuda a controlar el nivel de estrés de una persona, sino que también permite controlar los biorritmos encargados de producir hormonas dedicadas a regular el sistema inmune. Una de estas hormonas es la melatonina, la cual se produce de noche y está relacionada con la supervivencia de linfocitos y a una mayor producción de anticuerpos. Varios estudios han comprobado que la escasez de sueño antes o después de la vacunación puede reducir la eficacia de la vacuna.

El efecto de una vida activa

Tener un estado nutricional óptimo es otro detalle que ayuda a optimizar la eficacia de la vacuna ya que existen muchos nutrientes que han sido vinculados con el sistema inmunológico, como es el caso de la vitamina C y el ácido fólico. El colágeno también ayuda a hacer frente a las infecciones y patógenos. De todas formas, los estudios confirman que una dieta equilibrada, además de ser un aporte balanceado de energía, también es clave para mantener un sistema inmunológico saludable. También hay que destacar que las personas con altos índices de masa corporal u obesos presentan una menor producción de anticuerpos, linfocitos T y citosinas después de la vacunación.

El efecto de los antibióticos

También es importante tomar en cuenta la microbiota intestinal, ya que sus funciones son claves en la protección ante microbios patógenos y la regulación del sistema inmune. Asimismo, si la composición de la microbiota intestinal es estable hay una mayor presencia de Firmicutes, lo que se asocia a una respuesta de anticuerpos. Cuando ocurren cambios en una dieta, el surgimiento de una patología o el consumo de antibióticos pueden afectar la microbiótica y la respuesta ante la vacuna. En estos casos ha sido beneficioso el consumo de probióticos.

El consumo de tabaco y alcohol

Uno de los efectos nocivos de consumir tabaco es que afecta directamente la defensa de la mucosa respiratoria de una persona y se ha asociado a la reducción en la producción de anticuerpos en una persona después de recibir una vacuna. Además, hay que resaltar que el consumo de alcohol tiene el efecto de suprimir la inmunidad del cuerpo cuando se recibe una vacuna y puede alterar la composición de la microbiota intestinal y las células inmunes que contiene.

Escritor y periodista con más de 10 años de experiencia en las áreas del periodismo y escritura creativa.