Un gobierno ahogado por la guerrilla

Si el problema lo iban a resolver dos policías...

El gobierno anda mal por las calles, pero todavía no se entera. No tose ni lagrimea, como el que tiene gripe, pero sí estornuda mucho.

Estornudo Amarante, estornudo Guanchi, estornudo gas pimienta...

Piensa que la fiebre no está en la sábana, pero una sábana mojada de sudor, que casi puede exprimirse, es un mal síntoma.

Que no hable de encuestas ahora, porque las encuestas tienen su tiempo, su momento, y este no es uno de ellos. Los pocos que hacen ruidos son más importantes que los muchos que callan. Los que luchan son los imprescindibles.

¿Dónde el médico y cuál la medicina?

Tampoco está en manos de buenos facultativos si encarga su estrategia a dos policías de Moca. Es no conocer la Policía, pero menos a Moca.

Respetó tanto el debido proceso, que en un descuido dejó que lo marcaran, y lo que pudo ser cosa de dos o tres, ahora es del régimen entero.

El caso Odebrecht no concluye ni en Brasil, solo que al igual que otros países metieron a uno o a dos presos, y así, no resuelven la corrupción, pero sí se cubren de la impunidad.

¡Cuánta falta hace una guardia como la de Mon!